El avance tecnológico chino toma un giro inquietante con la creación de un proyectil cinético lanzado por un cañón electromagnético, capaz de alcanzar velocidades vertiginosas de 7.000 km/h. Este desarrollo militar plantea cuestionamientos sobre la supremacía tecnológica en el ámbito armamentístico.
En un contexto donde la importancia de la artillería en el campo de batalla se destaca, científicos chinos de la Universidad Naval de Ingeniería han alcanzado un hito al combinar un proyectil inteligente con un cañón electromagnético. Este proyectil, denominado la ‘bala soñada’, es capaz de ajustar su trayectoria en vuelo, ofreciendo una precisión sin precedentes. La tecnología electromagnética china, que permite velocidades de hasta 7.000 km/h, ha superado las expectativas y desafía los intentos anteriores de Estados Unidos en el desarrollo de un sistema similar.
Estados Unidos había iniciado un programa para desarrollar un cañón electromagnético en la década pasada, denominado la ‘bala soñada’, pero el proyecto fue abandonado oficialmente en 2021. China, aparentemente sin ayuda externa, ha retomado el desafío y ha superado con éxito la creación de un cañón electromagnético y la integración de un proyectil inteligente. El avance se suma a otros logros recientes en tecnología militar, consolidando la posición de China en la vanguardia de la innovación armamentística.
La combinación de alta velocidad, guiado satelital y la capacidad del proyectil para ajustar su trayectoria en vuelo posiciona a China en la vanguardia de la tecnología militar. Este nuevo desarrollo plantea preocupaciones sobre el equilibrio de poder y destaca la necesidad de que otras naciones refuercen sus esfuerzos de investigación en el ámbito militar.
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